Así empieza el articulo que con frecuencia diaria publica el gurú preferido de nuestro gótico presidente, Paul Krugman.
Con una deficitarias cuentas no solo en el estado central, si no en los ayuntamientos como el de Madrid, que tiene un déficit bestial que ya estamos pagando los que vivimos en la capital y otros que ya están en quiebra técnica , pero además tenemos que sumar.
- Una muy baja movilidad laboral dentro de España, sobre todo en la función publica gracias a un sistema autonómico poco eficiente, que vigilan mas sus reinos de taifas lingüísticos, que crear riqueza. Eso sin contar con la infinita burocracia burrocracia para abrir un negocio.
- Un anquilosado sistema laboral en el cual los sindicatos (que no crean puestos de trabajo) se niegan a ceder, y que el presidente tiene miedo a utilizar la potestas que su cargo le confiere, para afrontar la ya urgente modificación del sistema laboral Español.
- Una corrupción que campa a sus anchas por la península, como lo hizo Napoleón en su tiempo, arrasando las instituciones democráticas.
¿Cual es la solución?, (además de luchar para subsanar los puntos anteriores) o devalúas la moneda, lo cual ya no es posible porque estamos dentro de la zona Euro, o devaluar sueldos pero esto sinceramente lo veo muy difícil.
Nos espera una larga travesía por el desierto a la japonesa.
El señor Krugman ha vuelto a insistir en lo descrito en unas declaraciones en la ciudad Argentina de Buenos Aires : Krugman recomienda a España una «devaluación» con ajustes de salarios y precios
